Paciente con urticaria crónica continua desde 2005 y test de autosuero positivo, sin control pese a antihistamínicos a dosis altas, anti-leucotrienos y múltiples cursos de prednisona.
En febrero de 2020 iniciamos en Clínica Subiza un tratamiento de autohemoterapia con sangre autóloga:
inyecciones intramusculares de 5 mL de sangre propia, sin procesar, una vez por semana durante 8 semanas.
A partir de la 9.ª inyección comenzó una mejoría muy marcada.
En las dosis 13.ª y 14.ª (última inyección) la remisión fue completa (100%).
Desde entonces, sin medicación y sin recidivas hasta hoy, año 2025.
Diagnóstico:
Urticaria crónica autoinmune (ASST+).
Persistió el dermografismo, pero sin síntomas clínicos.
Conclusión
En casos seleccionados de urticaria crónica autoinmune, la autohemoterapia con sangre autóloga puede ser una alternativa eficaz y segura, siempre bajo supervisión médica especializada.